Dicho concierto, dirigido por David Mallet, incluye célebres colaboraciones con figuras como David Bowie y Bryan Adams, y ha sido “meticulosamente restaurado” para ofrecer una experiencia visual impresionante.
Lanzado en mayo de 1984, Private Dancer marcó un renacer en la carrera de Tina Turner, quien había atravesado una dolorosa separación de su exmarido, Ike Turner. Tras escapar de un matrimonio abusivo, la artista se encontró en una situación precaria, viviendo de cupones de alimentos y realizando shows de cabaret para saldar sus deudas.
Sin embargo, su talento no pasó desapercibido en el Reino Unido, donde tuvo el apoyo de artistas como Rod Stewart y la invitación de los Rolling Stones para unirse a su gira.
Tras el lanzamiento del sencillo “Ball of Confusion” (que alcanzó la cima de las listas en Gran Bretaña), la disquera Capitol autorizó la grabación de un álbum con presupuesto para dos semanas en el estudio.
Fue así que llegó a manos de Turner y su equipo, quienes le dieron un giro a la canción.