La canción, que dura poco más de cuatro minutos, cuenta con pasajes de piano que recuerdan a “Bohemian Rhapsody”. Al hablar sobre la pista en el documental de 2003, Greatest Video Hits 2, el guitarrista de Queen explicó su devoción por el tema: “En mi opinión, esta es una de las canciones más hermosas que Freddie jamás haya escrito”, aseguró.
“Viene directamente del corazón y él se abrió durante su creación”, afirmó May. “Me senté con él durante horas y horas, simplemente pronunciando cada palabra y tratando de aprovecharla al máximo. Es algo muy revelador sobre cómo son las relaciones y él estaba hablando de su relación”, agregó el violero nacido en Hampton Hill, Middlesex.